ESCENA CRÍTICA
RODRIGO ZÚÑIGA [En el fondo del río están]
Hay que estar muy loco, en algún paraje recóndito e indefinible de uno mismo, hay que tener el cielo dividido en ocho, como dice mi hijo, hay que estar verdaderamente rematado para escribir poesía. Yo llevo las aguas contaminadas. Mis aguas están llenas de crujidos y de maderas podridas, de astillas que se van adentrando en el dolor. Más loco, más idiota, más rebuznante me siento aún por pensar que, de esas bestias malheridas, viene algo que amenaza con ser hermoso.